Si eres de las que dicen “quiero un ramo como si lo hubiera cogido del campo”, esta puede ser tu elección.
He usado una paleta a base de pequeñas flores silvestres, Paniculata, glixia, Botao, phalaris, blossom y también espigas de avenas y de otras gramíneas. He evitado dar el protagonismo a ninguna flor, para buscar por el contrario la ligereza y la belleza de lo que podemos encontrar en un paseo por la naturaleza. Para reforzar ese aspecto casual, lo atamos con arpillera, pero ponemos además un lazo de terciopelo granate para darle fuerza.
Con la corona Paloma será el complemento perfecto!!